12 de agosto de 2008

Cuba Tours

Desde hace muchos años visitar Cuba, se había convertido en un sueño o una meta que cumplir, afortunadamente gracias a una persona muy especial, por razones del destino me invitó a pasar un fin de semana en La Habana y en Matanza, dos regiones importantes de este hermoso y solidario país.


Cuba puede ser vista desde muchas ópticas, tanto política, económica, social, cultural e histórica, cualquiera de estas expresiones puede provocar las más apasionantes discusiones, por su historia y su posición geográfica con relación al resto de América es privilegiada. Este país hasta el día de hoy, a nivel regional goza de los mayores índices de desarrollo humano, muy por arriba de los países centroamericanos, sino consulten los últimos informes del PNUD sobre este tema.


De este viaje tan fascinante como divertido, se convirtió en toda una aventura, los dos aspectos más interesantes fue conocer la hermosa Habana Vieja, un lugar atrapado por el tiempo colonial, un deleite para los ojos y sentidos de las fascinante arquitectura en cada una de la calles en las que el “Tour” nos dirigía, lugares tan pletóricos como la Plaza de la Revolución escenarios de la historia reciente de nuestra Latinoamérica, vigilados por la mirada del siempre joven “Che Guevara”, incitando con su mirada puesta en el horizonte que la juventud es digna de alcanzar nuevas glorias para nuestra América.


El aroma a tabaco y ron se transpira por cada plaza de esta ciudad capital La Habana, rostros, siluetas, fantasmas y sombras deambulan por los callejones empedrados y se proyectan por los empinados edificios coloniales y modernos, dejándose descubrir por la imaginación de turistas americanos como europeos.


Al igual que todos los países de Latinoamérica y el Caribe, Cuba no es la excepción en cuanto a la crisis económica, y por esta razón que tanto la producción de azúcar y el turismo se han convertido en los dos rubros más fuertes de generan divisas para esta isla caribeña. Sobre el rubro de turismo tienen dos aspectos a resaltar el primero es la arquitectura colonial de la vieja Habana y el otro son las hermosas playas, sobre todo en este mes que es verano y la afluencia de europeos es muy alta.


Para ingresar a Cuba, únicamente necesitas una Tarjeta de Turista, ésta la puedes conseguir en la embajada de Cuba, además de portar tu pasaporte, con tus documentos en regla y boletos aéreos, tomas un vuelo a San José, Costa Rica, esperando la escala hacia La Habana, Cuba, puesto en la isla, si llevas dólares americanos tienes que cambiarlos con pesos cubanos, el tipo de cambio hasta la fecha es por U$1.00 te entregaran 0.80 pesos cubanos, es decir si cambias U$ 100.00 te dan 80 pesos cubanos.


Lo más recomendable es que contrates a una agencia de viajes que además tenga contacto con las agencias de turismos locales, puesto que es muy más sencillo la estadía porque te garantizan el hotel, transporte y la alimentación, incluyendo el consumo de las tradicionales licores, como la Habana Club y la cerveza Cristal.


Hay una variedad de hoteles, y lugares en los que se puede divertir, eso dependerá del presupuesto con que cuentas, también los tours contemplan estadías en las playas, particularmente visite Varadero una hermosa playa de arenas blancas, ubicada en Matanzas a 105 Km de La Habana, esta playa es casi el equivalente a la isla de Corn Island en Nicaragua por sus arenas.


En cuanto a la seguridad ciudadana, como en cualquier lugar del mundo siempre se corren riesgos, eso dependerá de las precauciones que se tomen, sin embargo las dos ciudades que visite tanto La Habana y Matanzas hay presencia policial, sus calles y avenidas señalizadas y algo que me impacto fue la limpieza de sus calles, no tanto por la limpieza que pudiera realizar el Estado, sino porque la gente tiene la cultura de depositar la basura en su lugar y sobre todo que hay lugares en donde hacerlo.


Volviendo sobre la Vieja Habana, que fue la parte más fascinante del viaje, porque en ella se conserva viva la presencia de la historia colonial, en particular plazas en donde se realizaba la compra y venta de esclavos negros, el fuerte más importante que protegía a la ciudad de las incursiones de piratas, en fin todo deleite para los que disfrutan de revivir en su memoria estos episodios tan decisivos en la formación de nuestra cultura.


La Habana Vieja ha sido declarado patrimonio de la humanidad por la UNESCO; con los fondos que esta agencia proporciona se ha iniciado la restauración de muchos de los edificios coloniales, sin embargo no es suficiente para recurarlos, por lo que se ha creado una sociedad que se ha dado a la tarea de recatar estas joyas arquitectónicas.


En todos estos lugares puedes adquirir artesanías, camisetas con la figura del Ché, libros y revistas en donde se narra la gesta de la Revolución Cubana, también te puede comprar los famosos y legendarios habanos, con sus reconocidas marcas como el “Lancero”, que fue el puro predilecto de Fidel cuando fumaba, Romeo y Julieta, entre otros, también el ron Habana Club, que tiene un precio de 5 pesos cubanos, los cigarrillos Popular que cuentas 0.6 centavos.


Cuba para muchos nicaragüenses ha significado un lugar de solidaridad, en donde las respuestas a problemas de salud y estudio se han resuelto, y para los cubanos que nos guardan un gran cariño, se ha significado un desafío para alcanzar los sueños de justicia social, sirva este somero relato para conocer este bello paraíso tropical.

Revista Musunce, 13 años en el corazón de las y los segovianos... Descargar