15 de octubre de 2009

“Saudades do Brasil”

Nadie puede dejar de pensar cuando se menciona Brasil, tres cosas importantes a saber, las “garotas” de Río de Janeiro (chicas), las novelas y el futbol, el orden de importancia varia de acuerdo a las preferencias de cada quien.

Siguiendo con el viaje a Brasilia, me habían dicho que el clima era muy seco, al punto que me podría provocar algunos efectos secundarios como sangrado de nariz y otros malestares, afortunadamente doy fe de que ni una ni la otra cosa me aconteció. Como había mencionado anteriormente la capital de Brasil, es una belleza en todos los sentidos de la palabra, para ser honesto no es deslumbrante, pero si tiene un toque mágico, ya habíamos comentado que es una de las pocas capitales jóvenes del mundo.

Después de mi estadía en Brasilia, inicie mi viaje de regreso, pero antes haría una escala en Sao Paulo, una de las urbes mas famosas e inmortalizadas en las novelas brasileñas, la llamadas “selva de cemento”; fundada en 1554 es la capital del Estado de Sao Paulo y la principal ciudad de la región metropolitana, con una población estimada de 19.505.000 habitantes en 2009, es la octava área urbana más grande del mundo, así como la mayor megalópolis de Brasil y América Latina. Es la ciudad de Brasil con mayor población y el principal centro financiero del país y uno de los mayores del mundo. Es considerada la mejor ciudad para hacer negocios, también es llamada por los brasileños como la ciudad que no puede parar.


Conocí un excepcional parque llamado Villa Lobos, tiene grandes hectáreas y puedes practicar casi todo los tipos de deportes, caminar, pasear en bicicleta, en fin un lugar muy agradable para disfrutar en familia, en pareja o solo.

Otro de los atractivos o lugar íconos de Sao Pablo, es la avenida “Paulista”, según me explicaban es una de la arterias principales de esta ciudad, sitio para las celebraciones o huelgas, la avenida se convierte en un lugar ideal para hacer festejos o protestas.

Con relación a la música puede mencionarles que el ritmo que me ha cautivado, más allá de la popular Samba, es el ritmo de Bossa Nova, y en especial la canción Garota de Ipanema (en español Chica de Ipanema) es una canción compuesta en 1962, con letra de Vinícius de Moraes y música de Antonio Carlos Jobim, es así que tanto Jobim como Vinicius no estaban conformes con la letra hasta que un día, cuando ambos estaban en el bar Veloso (hoy Garota de Ipanema, en la esquina de Prudente de Morais y Montenegro, actualmente rua Vinicius de Moraes), en Río de Janeiro, decidieron rebautizar la canción y dedicar los versos a una muchacha que solía pasar rumbo a la playa.

Su letra es muy exquisita: “Mira que chica mas linda, mas llena de gracia, es esa muchacha, que viene y que pasa, con su balanceo, camino del mar, Ella de cuerpo dorado, del Sol de Ipanema, y su balanceo es todo un poema, y nunca me mira siquiera al pasar.”

Esta chica después de 47 años que en su honor compusieron la canción, logre conocerla, un tanto entrada en edad, puesto que vivía en la misma localidad donde me hospede, en realidad fue un honor para mi poder conocerla. Su verdadero nombre es Heloísa Eneida Menezes Paes Pinto, ella es dueña actualmente de una cadena de locales de venta de bikinis llamado Garota de Ipanema.

Para la próxima entrega hablare de una de mis pasiones, el futbol y procuraré hacer una grafica del significado del este hermoso deporte para los brasileños.

8 de octubre de 2009

Muere Mercedes Sosa, la Voz de América Latina


La folklorista argentina, de 74 años, popularizó la música popular latinoamericana en todo el mundo

SOLEDAD GALLEGO-DÍAZ - Buenos Aires - 04/10/2009

La Negra, la cantante folklorista de América Latina por excelencia, Mercedes Sosa, ha fallecido este domingo en una clínica de Buenos Aires, a los 74 años, víctima de una enfermedad hepática. Miles de seguidores en América Latina y en España (donde estuvo exiliada cuatro años durante la dictadura militar argentina) cantaron con ella su extraordinaria interpretación de Alfonsina y el mar, y otras zambas, chacareras, milongas y tonadas que popularizaron en los años 70 y 80 el folklore latinoamericano en todo el mundo y la convirtieron en una de las mejores y más famosas intérpretes del continente. A última hora de ayer la presidenta argentina, Cristina Fernández, y su marido, Néstor Kirchner, han acudido al Palacio del Congreso de Buenos Aires, donde se instaló la capilla ardiente, para dar el pésame a la familia de la artista.

Su muerte ha sido acogida con dolor también en los medios rockeros y de música pop de América Latina, a los que siempre prestó su generoso apoyo y colaboración. Su relación con los músicos jóvenes argentinos fue constante: era ella la que les buscaba para ofrecerles incorporar algunas de sus canciones en los álbumes de música folklórica que iba produciendo (más de 40 a lo largo de su carrera). En su último álbum doble, Cantora, ya enferma, fueron muchos de esos músicos quienes se ofrecieron a cantar duetos con ella: Shakira, Fito Paéz, Charly García, Caetano, Soledad, Julieta Venegas, Drexter o los españoles Joan Manuel Serrat y Joaquín Sabina colaboraron para lanzar un disco que ahora esta nominado como mejor álbum del año para los Grammys Latinos 2009. "La Negra era la mejor cantante de Argentina y la voz de América Latina", ha asegurado Fito Páez. Ella, sin embargo, rehusó siempre el apelativo de "la voz de América Latina", que le parecía excesivo.

Michelle Bachelet, presidenta de Chile, que se encontraba el viernes visitando precisamente el pueblo natal de la folclorista chilena Violeta Parra, expresó su cariño y su admiración por Mercedes Sosa y recordó la amistad que mantuvieron ambas cantantes. La Negra Sosa cantó insuperablemente algunos de los temas más famosos de Parra, entre ellos su Gracias a la vida. "Ella era, quizás, la voz mas vigorosa de América Latina", lamentó Bachelet.

"Mercedes fue un ser bondadoso, sin ningún tipo de maldad y su presencia era una necesidad para todos los que actuamos o grabamos con ella", ha resumido el letrista Antonio Tarragó Ros, en nombre de los músicos argentinos.

Mercedes Sosa fue siempre una cantante comprometida con causas políticas y sociales. Formó parte de la bohemia que acompañó el folklore argentino en los años 70-80, el llamado Movimiento del Nuevo Cancionero, y participó en cuanta marcha, manifestación o encuentro hubo en esa época a favor de las comunidades indígenas, luchas sindicales o encuentros políticos sobre los derechos humanos. Durante un concierto celebrado al inicio de la dictadura militar fue detenida, junto con buena parte de su público. Al recobrar la libertad, marchó al exilio (España y Francia), de donde no regresaría definitivamente hasta la llegada del presidente Raúl Alfonsín y la democracia. En una reciente entrevista comentó aquellos momentos de intensa lucha política: "Antes, los sueños eran más radicales; perfectos. Ahora, se hace lo que se puede".

Viuda, con un hijo y dos nietas, Mercedes Sosa se distinguió por su magnífica voz, con registros de soprano y de una belleza muy singular, y su conexión con todas las grandes figuras del folklore latinoamericano, desde Atahualpa Yupanqui a Violeta Parra. Sus interpretaciones de la Cantata Suramericana o la Misa Criolla recibieron premios internacionales. Sin embargo ella siempre se consideró una "negra petisa (una mujer pobre, morena y pequeña), sin glamour, tal y como se refiere a mí la oligarquía de mi país". "Este es un país de negros", decía con ironía, "en el que todos son rubios".

En los últimos tiempos, cansada y enferma, aseguraba encontrarse feliz, rodeada de afecto. "Tengo suerte", decía, "...pero me ha costado mucho". La Negra Sosa luchó hasta el final por cumplir los objetivos del Manifiesto del Nuevo Cancionero que firmó en Mendoza, en 1964, cuando sólo tenia 28 años, y en el que se proponía renovar la canción argentina popular para conseguir que "se integre en la vida de todo el pueblo, expresando sus sueños, sus alegrías, sus luchas y sus esperanzas".
Serrat:"Ha hecho llorar a muchos hombres"

Joan Manuel Serrat estuvo con ella hace poco más de tres meses, grabando Aquellas pequeñas cosas, la última colaboración desde que se conocieron en 1969 en Buenos Aires. Desde entonces, un sinfín de conciertos compartidos, pero también de "discusiones y abrazos y de todo aquello que compartes con quien quieres". "Mercedes era una artista muy popular en el mejor sentido, hay muy pocos que puedan dar la emoción que ella transmitía", ha asegurado hoy desde Estoril el cantautor, que elogió su "voz fantástica, afinada, pero que no hubiese valido de nada sin un corazón que la empujara y ella lo tenía y eso lo sabía la gente; ha hecho llorar mucho a los hombres", sentenció.

Revista Musunce, 13 años en el corazón de las y los segovianos... Descargar